Diario La Estrategia
El académico e integrante de la Comisión Bravo indica que una situación en la que sólo el individuo genera su pensión, va a en contra de los criterios básicos de la seguridad social.
– ¿Cuál es la lectura que usted hace del conjunto de medidas presentadas por la Presidenta Bachelet?
– Las medidas anunciadas de manera general por la Presidenta requieren un estudio más profundo de su contenido en cuanto a su beneficio de mejorar las pensiones. Sin duda, establecer una cotización superior en un 50% a la que hoy existe es un avance importante, y que esta sea de cargo del empleador también nos parece relevante. Quisiéramos también ver reflejada una mayor precisión en lo que es el fondo de ahorro solidario colectivo. Creemos que un pilar que mejore las prestaciones de los actuales pensionados, en particular de aquellos que son de sectores medios, es una buena medida, más si es con un fondo solidario, porque en seguridad social es muy importante el aporte de todos. No se trata de instaurar un sistema de reparto clásico sino que se trata de que el mecanismo que se implemente incorpore fórmulas efectivas de solidaridad entre generaciones y entre cada generación.
– ¿Considera viable la redistribución del aumento del 5% de cotización?
– Todo esto tiene que ver con conversaciones que serán necesarias para llegar a un acuerdo suficiente y que permitan que estas medidas que se quieren adoptar encuentren el consenso necesario, pero es muy importante que, sino toda, gran parte de esa cotización vaya a un fondo solidario.
Si no endurecemos un mecanismo de solidaridad intra generacional adecuado a la realidad económica, de las condiciones de expectativa de vida, y de cómo evoluciona el mercado laboral, vamos a mantener la situación en la que solo el individuo va a generar su pensión, y eso demuestra que va a en contra de los criterios básicos de la seguridad social.
– ¿Qué efectos podría tener la devolución de las comisiones por parte de las AFP si obtienen rentabilidades negativas?
– Hay que incluir correcciones a los mecanismos de comisiones que perciben las AFP, transparentar esa información y que se ajusten a una realidad en que las personas perciban que lo que ellas están generando como rentabilidad también tiene un correlato en lo que el administrador está obteniendo como comisión.
– ¿Cómo ve la posibilidad que los cotizantes puedan tener mayor participación en la administración de los fondos?
– Es muy importante la participación. Hay que definir en qué lugar y cómo se generan los representantes de manera de que sean autónomos, y que sean representativos y tengan independencia real de la administración para que puedan hacer aportes que vayan en la dirección de que la gestión ayude a mejorar las pensiones.
